Dos semanas duró el acampe en Plaza de Mayo que exigía la liberación de la dirigente Milagro Sala, detenida en Jujuy.
En gran parte de la plaza se acumularon botellas, cartones y papeles, que empleados de Espacio Público porteño comenzaba a limpiar.
«Sólo se levantaron las carpas de alrededor de la grande, la carpa grande con la actividades sigue», dijo a LA NACION el coordinador nacional de Tupac Amaru, Alejandro Garfagnini.
El martes próximo se cumple un mes de la detención en la capital jujeña y organizaciones sociales y sindicales anticiparon que habrá un paro nacional y movilización.
«Le pedimos a los compañeros que estaban en las carpas chicas que vuelvan a los barrios para organizar la marcha del martes, que va a ser muy grande», dijo Garfagnini.
El acampe se instaló como «resistencia» a la detención de Sala en Jujuy, procesada por «asociación ilícita, fraude a la administración pública y extorsión», según una denuncia del gobierno del radical Gerardo Morales, enemistado desde hace años con Sala. Cree que Sala desvió $ 29 millones de pesos que salieron de las arcas públicas.
Fuente: La Nacion
