La referente de Género en Salta, Mónica Menini, se refirió a lo que dejó la marcha del #8M y la participación de la ministra de Derechos Humanos y Justicia de Salta Pamela Caletti.
«La marcha fue impresionante, muchísima gente, algunas más jóvenes no habían vivido una marcha tan grande, hubo 6, 7 cuadras de convocatoria muy amplia de organizaciones de mujeres, sociales, partidos políticos que también tuvieron referencia en esta marcha”. Además agregó: “La gente deja de preocuparse tanto y empieza a ocuparse de lo que nos está sucediendo en nuestra provincia, escuchar a la madre de Daniela Guantay sobre el final del acto fue estremecedor, estar cerca de una mujer que vivo el horror, como tantas otras compañeras que buscan a sus hijas y la policía no les toma la denuncia».
En relación a la presencia de Caletti, dijo: «Sigue usando argumentos que los tendría preparados, porque lo que fue a hacer la Ministra fue una afrenta al movimiento de mujeres. Realmente hubiésemos esperado que ella repiense la situación que ella sabía que iba a generar en la marcha, que lo sabía perfectamente», y agregó: «el mismo documento que firmamos más de 52 organizaciones decía que no íbamos a aceptar la hipocresía de los funcionarios que se ponen la camiseta del «ni una y menos» y detrás de esa camiseta vienen a marchar con nosotras cuando ellos son responsables».
Menini insistió: «La Ministra maneja el presupuesto, los profesionales, la infraestructura del estado para poder solucionar o transformar esto que le pasó por ejemplo a la familia de Daniela Guantay. Jamás vamos a aceptar que una funcionaria o un funcionario en lugar de posición actúe así, yo vivo en sororidad con quien me necesita pero ese concepto feminista no lo voy a ocupar con alguien que ocupa un lugar de decisión y desde ahí creen que me van a a correr la parada. La respuesta que ha venido teniendo la Ministra hacia nosotras era inaceptable que vaya a la marcha».
Por último, contó que antes de llegar a esta situación, muchas veces, dialogaron. «nos hemos puesto a dialogar con ella, porque somos dialoguistas, pero a ella le entra por una oreja y le sale por la otra. La ministra llegó custodiada por la policía de civil, con funcionarios como con guardia pretoriana pero se fue solita».
De nuestra redacción.