Martín Bonilla de la Orquesta Sinfónica de Salta, se refirió a la situación de incertidumbre laboral de los integrantes de ese cuerpo y a las trabas que se están poniendo en el Senado provincial para modificar esa situación.
“Hace 20 años que los integrantes de la Orquesta Sinfónica de Salta, tenemos lo que se llama, contratos a término, que están ronzando la ilegalidad. Nuestros contratos son de tres años, durante esos tres años, estaríamos en la planta pero vencido los tres años, volvemos a un limbo, que depende de la firma de un decreto para que te re-contraten”, afirmó Bonilla.
Además dijo: “no tenemos los mismos derechos que otros trabajadores del estado, dependemos de decretos y de algunas discrecionalidades. Esto es lo que nos asusta, lo que buscamos es una solución a largo plazo. Queremos es una normativa que nos contenga legalmente como a todos los trabajadores del Estado, para no estar dependiendo de la firma de un decreto o del humor o de cuestiones políticas”.
“Hace muchos años venimos trabajando por la modificación de nuestra ley, que nada más tendría que ver con eso, con la duración de los contratos, que los contratos no sean cada tres años”.
“Todo lo que planteamos está en una modificación de la ley que se aprobó el año pasado en la cámara de Diputados por unanimidad e incluso se hicieron cambios y aportes de distintos sectores que fueron muy enriquecedores, hubo un debate muy interesante el año pasado. A fin de año quedó en el Senado, se iba a tratar a comienzo de abril en las primeras sesiones y se empezó a dilatar el tratamiento, aparecieron senadores que pusieron objeciones pero no se entiende bien, si es por cuestiones políticas, si es porque es un año electivo, no sabemos para dónde va la cosa”, expresó.
Al ser consultado sobre los argumentos esgrimidos por los que se oponen al tratamiento, sostuvo: “nosotros decimos que son engañosos esos argumentos, como el de mantener la excelencia, realmente que un trabajador, de cualquier área, que esté con miedo, angustia o con la ansiedad de poder perder el trabajo, es difícil que sólo haga rendir mejor. Es más, creemos que no hace falta amenazar a la gente cada tres años con que pueden perder el trabajo para trabajar bien, eso no existe. Existen muchas herramientas para mantener la calidad”.
“Los argumentos que tienen que ver con la cuestión económica también son falsos porque esto al Estado no le significaría ni un centavo más, tiene que ver con derechos laborales, no tiene que ver con presupuesto, ni con aumento de sueldo, ni con mejorar cuestiones que tienen que ver con lo económico, para el estado es exactamente lo mismo, lo que nos da a los trabajadores de la Orquesta, la tranquilidad de poder tener un trabajo estable y no tiene nada que ver con cuestiones económicas”, cerró el músico.
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