Conoce al cantante y compositor Juan Gio presentado por Atómica Latente de Simón Bruni.
Atómica Latente: – Contáme de tu infancia y si recordas tu primer acercamiento a la música…
Juan Gio: – Digamos que… mi infancia estuvo rodeada de música. Mi vieja es directora de coros y cantante; mi vejo es abogado pero tocaba obras de Bach y de Tárrega en guitarra. Obras clásicas y muy difíciles así que más que un acercamiento mío a la música, la música se me acerco desde muy pero muy chico y no tuve otra opción. Pensá que mi vieja cantaba obras de Schumann, Fauré, Schoemberg; música contemporánea muy compleja. Desde muy chico participe en la escucha, poniendo la oreja, el cuerpo, la vivencia en mucha música muy distinta; a la vez con los coros mi vieja hacia música popular y se respiraban melodías diferentes, los ensayos eran en casa; siempre hubo encuentros de coros así que de chico me pervirtieron musicalmente.
AT: – ¿Cuándo te diste cuenta que la música era lo tuyo?
JG: – Creo que en la adolescencia, en esa etapa donde nacen los ideales y buscas formas de expresarte como para salirte de la media o para no repetir las cosas que te rodean y que no te gustan, para poder romper algún tipo de molde con alguien o con algo, con la sociedad. creo que en la adolescencia miras a tu alrededor y decís bueno… “qué armas tengo como para cambiar algo en este mundo” y creo que en mi caso la música siempre fue un arma muy poderosa, depende el uso que se le dé.
AT: – Completa la frase. Pasan los años y…
JG: – Pasan los años, “pasan los jugadores Gimnasia Esgrima que pone institución, pensar que muchos viejos se murieron y no pudieron ver al lobo campeón” esa es una frase pincharata, es un cantico clásico de Estudiantes. También pasan los años y quedan los artistas por supuesto como dice Enrique Pinti.
AT: – ¿Qué sonido emite tu animal preferido?
JG: – No tengo un animal preferido a decir verdad, reconozco que el canto del zorzal en la madrugada de verano me genera una nostalgia impresionante y me gusta esto de que cante descolocadamente, que no es ni de día ni de noche, elige ese momento para hacernos acordar que hay algo que está en el medio que no es ni una cosa ni la otra. En Brasil hay un pájaro que lleva Zabia que es como un zorzal brasilero y Chico Buarque y tom jobin lo usan. Hay una canción que se llama zabia “poesía” recordando siempre ese Brasil nostálgico. Ellos hablan del exilio, voy a volver “ vou vota” para escuchar ese zabio.
AT: – ¿Un Olor?
JG: – Hay varios, uno que me aprendí estos años fue la boca de mis hijos. El perfume del alientito de mis hijos eso es un olor que no conocía. Después el Jazmín, el Aromo que crece una vez por año, y los Tilos en la ciudad de La Plata.
AT: – Pensemos en el futuro. Te encontras hoy con 56 años, ¿en qué no quisieras haberte transformado?
JG: – No me gustaría convertirme en alguna figurita repetida. Me daría mucha bronca no potenciar mi originalidad y aportarle a este universo la verdadera originalidad que todos traemos, la batalla está ahí, no?…en no alienarse a varios sistemas sutiles que te hacen creer que sos original pero no; te están empaquetando en pequeños eslabones de una cadena más grande. A los 56 me gustaría haber potenciado mi originalidad con el arte, con la música, con la vida.
AT: – ¿Cuáles son tus principales influencias musicales?
JG: – Yo soy compositor así que mi deber es escuchar muchísima música y estoy obligado a conocerla, depende para lo que esté haciendo no? Mis últimos discos son discos de rock ahí mis influencias son los gigantes del rock desde The rollings stones, the beatles, Bowie, King crimson pasando por los Redondos de ricota , Garcia, Cerati, Spinetta, en mis discos están esos nombres pero también mis influencias son bjork, Radiohead, , bach, Paco de Lucia.
AT: – Mencióname tres discos que hayan marcado tu vida.
JG: – Clics Modernos y El amor después del amor como una unidad, abbey Road de los beatles y Oktubre de Los Redondos. Te tiro un cuarto, glen glow las variaciones de bach.
AT: – ¿A qué o quién le cantas?
JG: – Trato de no dedicar mis canciones, al menos cuando las compongo no las compongo para….no es una droga que invento para algo. Trato de que las canciones estén dedicadas a los dioses, a un algo más inexplicable, algo que no se puede abarcar y después por ahí se las regalo a alguien eso sí…”mira hice esta canción que en algún punto me influenciaste”. Pero… no dedico canciones para alguien en especial, sino para los dioses.
AT: – ¿Cuándo estas arriba de un escenario pensas en algo?
JG: – Trato de no pensar. Si estoy pensando en algo que no es la música, que no es lo que la música tiene que transmitir, quiere decir que hay un error. Así que si estoy pensando es porque no estoy actuando y no soy yo un instrumento. La idea es ser un instrumento más para expresar lo inexpresable o tratar de expresar lo inexpresable.
AT: – Contame tu experiencia en la tv, en Telefe.
JG: – En Telefe estuve varias veces en el programa Morfi. La tv es un medio de comunicación. No es el fin estar ahí, pero es un medio que conecta una cosa con otra; a partir de mi participación en Morfi me salieron muchos trabajos, pude cambiar el auto, comprarme dos departamentos en Puerto Madero y ahora soy CEO de Repsol (en su tono ironiza).
AT: – El año pasado terminaste un disco. Contanos un poco todo ese proceso creativo y de producción, y lo que le espera a futuro a ese disco.
JG: – Así es, saque mi segundo disco “Catedral, Cabaret y Cine” es un disco de autor de Rock, Pop, Balada con letras en español. Lo produje con Roberto Garcilazo y grabamos entre los dos casi todos los samplers e instrumentos, hay baterías también acústicos, bajos y guitarras. Es un disco de 9 canciones que propone algunas canciones oscuras y densas que son las que pertenecen al estado Cabaret. Hay canciones con mucha luz y más amables son las canciones Catedral y las canciones Cine son canciones más de la pantalla, de la filmación, de este mundo al que estamos más habituados, de la propaganda, digerible y hermoso como el cine. Es un disco que se está presentando con banda, con muy buenos músicos que me rodean, y su destino son las giras. Arranco ahora en La Plata, en Bs.As. y después el interior de la provincia de Buenos Aires y todo lo que valla surgiendo a lo largo del año. La verdad que se está escuchando muy bien, es un disco con muy linda aceptación.
AT: – ¿Qué recomendas escuchar primero Charly o Fito?
JG: – Creo que Fito para las nuevas generaciones es más directo, es muy complejo pero no tanto como García, el dios es CHARLY. Yo los comparo con Borges y Cortazar, como que Charly es el Borges, el tipo sintético que con dos o tres palabras te la manda a guardar y Fito es un tipo más amable en sus formas, con una poesía más entrañable, es más fácil de llegar. Así que en este caso Fito Páez.
AT: – ¿Verón o Maradona?
JG: – Maradona es un enviado del cielo, un tipo que ha revolucionado la historia del futbol, no solo del deporte sino políticamente. Pero me quedo con Verón, primero porque soy Pincharrata y segundo porque me crie en la calle Alvear en City Bell y donde se corta esa calle está el country de Estudiantes donde entrenan los jugadores, por esa calle yo he visto correr a jugadores como Farias, Palermo y obviamente a Verón. También creo que este tipo rompió con un paradigma, esto de que nadie es profeta en su tierra, bueno él si es profeta en su tierra. Y creo que eso no tiene comparación lo que ha logrado, que tú misma gente que lo halaban de vendido en algún momento, él volvió de Europa y saco a Estudiantes campeón, subcampeón del mundo y campeón de Libertadores. Así que Verón un profeta en su tierra.
AT: – ¿Fiesta o me quedo en casa?
JG: – Me gustan las dos. La fiesta en casa también, soy padre y he descubierto nuevas fiestas insospechadas adentro de la casa. También con los años vas descubriendo que la noche o lo que le llaman fiesta es una máscara también, una máscara necesaria porque cada tanto hay que salir y nada más lindo que salir teniendo un lugar donde volver.
AT: – ¿Cómo llevas tu profesión con tus hijos?
JG: – Mirá todavía no me llego ese momento en que vivo de giras de tal modo que no puedo ver a mis hijos, los llevó y traigo del colegio todos los días. Toco los fines de semana y si sale alguna gira suelen ser fines de semana. La idea del rock y las giras, el famoso Rockstar, cayó en desuso, esta pasado de moda, las nuevas generaciones entendieron de que se trata, a veces extrañas un poco, pero insisto es algo de otra época….
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