Se trata de un proyecto interinstitucional que tiene como objetivo el saneamiento del afluente y en el que participan el Ente Regulador de Servicios Públicos (ENRESP), la Secretaría de Ambiente y la Secretaría de Recursos Hídricos de Salta.
El Ente avanzó en conjunto con las dos secretarías en la conformación de la Brigada que tendrá como fin una política de saneamiento ambiental del Río Arenales, pensada desde el ejecutivo provincial.
En primera instancia, la mesa que contó con representantes de las gerencias del Ente avanzó en delinear una serie de acciones para recabar información del estado de situación del afluente.
Se comenzará con un muestreo, desde la cabecera del río hasta el tramo final ubicado en la desembocadura del Dique Cabra Corral, con el fin de tener un diagnóstico del estado de situación.
«En base a ello, los profesionales con incumbencia en la materia podrán realizar un análisis y diagramaremos un plan de trabajo», detalló el miembro de la Gerencia de Agua Potable del ENRESP, Víctor Anuch.
Por su parte, el presidente del Ente Carlos Saravia,declaró al respecto de la creación de la Brigada y sostuvo: «Vamos a controlar, vamos a evitar que haya daños ambientales, vamos a concientizar a la ciudadanía que es importante cuidar al río Arenales».
Esta no es la primera acción que toma el ENRESP con respecto al saneamiento del Río Arenales.
Meses atrás, informes técnicos develaban que el 30% de los líquidos cloacales que ingresaban a la Planta de Tratamiento de Aguas del Norte ubicada en zona sudeste de la Ciudad de Salta eran volcados sin ningún saneamiento al Río Arenales, debido a la saturación de la estructura.
A raíz de esto, Saravia emitió resoluciones que prohibía a Aguas del Norte autorizar nuevas conexiones de barrios privados al sistema cloacal debido a la falta de capacidad para el tratamiento de los líquidos. El presidente de la empresa encargada del servicio de agua, Ignacio Jarsún, recurrió la resolución y señaló falta de facultades de Saravia para ordenar sobre el tema.