Por Mariano Arancibia para Radio Dinamo
El domingo a la noche convocaba a salir. Hacía calor y en la Balcarce había de todo: festival de jazz al aire libre, la banda de reggae Nonpalidece y los mendocinos de Mi Amigo Invencible. Pasando la Entre Ríos ya se notaba que no era una noche más. Había mucha gente que iba y venía y llegando a la Necochea estaba todo colmado. De toda esta variedad musical, luego de escuchar un poco de jazz, nos fuimos para el bar.
Por primera vez tocaba en esta ciudad Mi Amigo Invencible. La excusa era la presentación de su reciente disco. La banda llegaba con buenas críticas. La revista Inrockuptibles los había colocado entre las siete bandas de “lo nuevo que hay que escuchar”, además eligió dos de sus videoclips entre los 10 mejores. También fueron tapa del suplemento SI! de Clarín y elegidos por la encuesta del suplemento NO de Página 12 como candidatos para mejor disco del 2015, en el que obtuvieron el tercer puesto, nada menos que debajo de “Los Amigos” de Spinetta y “Gratitud” de Los Espíritus. Es decir, que era un grupo renombrado que valía la pena llegar a escuchar.
A la hora de catalogarlos, en general, se puede decir que se trata de una banda ecléctica. En conversación con Radio Dinamo, Mariano Di Cesare, guitarrista y vocalista, admitió no tener un estilo determinado: “es imposible armar un corpus de discos que digan ‘este es nuestro sonido’, no sé porque pero no podemos, no nos sale”, dijo. De todos modos, al prestar atención, sus inspiraciones estéticas rondan por Mac Dearco, El Mató, Fun People, Joy Division o The Smiths, entre otros.
Entramos al bar cuando estaba por arrancar Bort. La banda local, logrando un sonido claramente más trabajado desde sus ultimas presentaciones; aunque cabe destacar que el cantante y guitarrista Juan Ottati en algún momento se zarpó con los gritos o hasta se olvido la letra- si su idea era ser desprolijo o colgado lo logró con creces. Pese a esto, su sonido transmite una notable potencia. Después toca Emi Livelli. En su nueva faceta solista, onda Bob Dylan, más relajada, el joven simpaticón se roba los aplausos del público solo con su voz, una guitarra y una armónica.
Luego fue el turno de la gente de Mi Amigo Invencible, quienes presentaron un repertorio basado fundamental en su disco “La Danza de los Principiantes”, sin olvidarse de incluir varias canciones de sus placas anteriores. Se destacaron entre otros temas: Noches de Ciencia Ficción, La danza de los principiantes, Edmundo Año Cero, Leningrado y Los Pájaros.
Al contar con dos percusionistas, su sonido resulta por demás efectivo. Amigos, parejas y una importante cantidad de gente que están presentes se agolpan frente al escenario (que por cierto fue cambiado de lugar atinadamente) y bailan en medio de un climax festivo. Mientras, un frontman agita todo el tiempo, el público se mueve como típicamente hacen los jóvenes fans del indie pop: en un mismo lugar, moviendo la cabeza de un lado a otro, los brazos de arriba abajo como si estuvieran haciendo bíceps y por momentos parecen extasiados.
El recital va de menor a mayor y llega a un momento alto cuando tocan “Viaje del Tiempo” y el cantante al palo ya, se anima a subir a una mesa del bar pero un traspié hace que quede planchado en el suelo casi al final de la canción, sin embargo por suerte resulta ileso, justo para el remate del tema: “soy un idiota importante que lo arruina todo por quedar bien”.
Fue un buen show el ofrecido por los mendocinos que ratificó los elogios de la prensa especializada y su ascendente momento.
P//D: Hicieron un cover de Flema pero no fue muy tenido en cuenta por el público.
PH: A. Drugs
